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Old building falling down

El viejo supermercado

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Una vez, un amigo compró un viejo supermercado y panadería. Le quiso dar otra apariencia y mejorarlo así que le hizo algunas remodelaciones. Le cambió el cielo raso y el piso, pintó con colores frescos las paredes, cambió la estantería e instaló un nuevo sistema de alumbrado. En el exterior, pintó la fachada y hasta cambió el techo.

limpian el exterior

A la clientela le gustaron los cambios. Mi amigo, poco tiempo después de haber inaugurado su nuevo supermercado, notó que parte del cielo raso empezaba a caerse, al inspeccionar, pudo ver que las piezas que sostenían los paneles del cielo raso estaban unidas solamente a una viga principal, que estaba tan podrida, que pronto colapsaría. Como el viejo edificio, es posible que encubramos el pecado por much

o tiempo, y puede que la gente ni siquiera se imagine lo que hay en nuestros corazones. Podemos hablar bien, actuar respetuosamente y hasta vestir elegantemente. Pero hay alguien a quien no podremos engañar. Amigo, no te engañes, mejor no esperes a que llegue el día, en que Dios revele en público tus podredumbres privadas.

¡Mejor revísate!

Tu hermano en Cristo, Rainner Chinchilla,
Costa Rica 🇨🇷