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Cuando pienso en la navidad, se llena la mente de recuerdos de mi niñez. Árboles decorados, luces parpadeantes, comida, regalos y San Nicolás. También recuerdo y lo veo hasta el día de hoy, cómo las personas se embriagan en esas fechas.
El consumo del licor se dispara aún más cuando estamos en fiestas navideñas. Aunque era sobresaliente recordar que Jesús vino, la “Feliz Navidad” del mundo contradecía la razón de su venida, porque Jesús no quiere que estemos felices en nuestros pecados. Como cristianos, es bueno recordar que Cristo vino al mundo como un niño, pero es mucho más importante recordar que vino para traernos esperanza, cambio, su amor y la promesa de que si le servimos, tendremos una vida nueva, tanto aquí en el mundo como en el cielo, con él. No es malo celebrar, pero no confundamos, la Biblia no nos manda a adorar a una estatua en un portal navideño, sin embargo, nos exhorta a creer en Jesús, nuestro Señor resucitado y a obedecer sus mandatos. También nos manda guardarnos sin mancha y apartados de lo malo. Señor, ayúdame a reconocerte, real y tangible en mi vida, para tener más fuerzas ante lo que no debo hacer.
Tu hermano en Cristo,
Rainner Chinchilla.
Costa Rica.
• No hay comentarios • Dios en la familia
Cuáles son los cuidados que una familia requiere, sabemos que en esta vida todo requiere amor y cuidados específicos.
Si vemos el ejemplo de las plantas sin los cuidados necesarios las plantas se maltratan y finalmente mueren, así Dios quiere que nosotros brindemos el cuidado que merece nuestra familia para mantenerse saludable y en la voluntad de Dios.
Tu Pastor y amigo Manuel Peralta.
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Es necesario hacer un alto en el camino para mirar atrás y establecer un balance de vida. Los seres humanos somos un cúmulo de experiencias, buenas y malas, que sumamos a lo largo de nuestro vivir, y muchas veces nos causa frustración el hecho de haber sido protagonistas en escenarios negativos, debido a la toma de malas decisiones, por motivaciones equivocadas, deseos egoístas, o el simple hecho de querer mantener el control absoluto.
Esto nos llevó a un punto muerto y descontrol, al no lograr nuestro objetivo. Sin embargo, al llegar al conocimiento de Dios y su Palabra, descubrimos con sorpresa, que Él puede tornar todo para bien, en la medida en que nos sometamos y nos rindamos ante su presencia, porque nos enseña que el camino del Reino consiste en que, “a los que le aman, todas las cosas les ayudan para bien”, Él es capaz de revertir todo lo negativo en bendición y convertirnos en mejores seres humanos que puedan ayudar a otros.
Amigo, seamos como el niño cuando está aprendiendo a caminar, él se toma de la mano de su padre y confiado da sus pasos. Te aconsejo que ya no camines más sobre tus propios pasos, tómate de la mano de Dios y entrégale tu vida, esa es la forma de encontrar el camino correcto.
Tu hermano en Cristo, Rainner Chinchilla.
Costa Rica